El aparato circulatorio se encarga de la circulación o transporte hasta todas las células del cuerpo de los nutrientes y el oxígeno recogidos por los aparatos digestivo y respiratorio, respectivamente. También reúne los productos de desecho para expulsarlos. Está compuesto por la sangre, los vasos sanguíneos y el corazón.
La sangre es un líquido espeso de color rojo que transporta los nutrientes y los gases y recoge los productos de desecho. Está integrada por el plasma y las células sanguíneas: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
Los vasos sanguíneos son conductos que forman un circuito cerrado por el que circula la sangre. Se clasifican en arterias, venas y capilares.
El corazón es un órgano musculoso que bombea la sangre por todo el cuerpo. Su interior se divide en dos cavidades superiores o aurículas, y otras dos inferiores, los ventrículos. Las aurículas y los ventrículos están separados por unas válvulas que permiten el paso de la sangre e impiden su retroceso.
La sangre realiza dos circuitos relacionados entre sí: la circulación menor y la circulación mayor.
Para trabajar estos contenidos:
- Accederemos al libro digital: Edelvives Digital Plus (contraseña: @Edelvives) y realizaremos una lectura de los dos apartados "Reconocer la digestión y la respiración".
- Resumiremos en nuestro cuaderno los aspectos más importantes.
- Realizaremos las actividades propuestas del libro digital: 1, 5, 9, 10 y 11.
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